
Justin dio un par de toques a la puerta.
- Pase.
Giró el pomo y entró a la oficina de su jefe, Snade. Se sentó en frente de él.
- ¿Y bien? – dijo Justin con una expresión fría en su rostro. La que tenía cada vez que su jefe le proponía algo.
- Te llamé para que nos vuelvas a dar tus servicios.- el hombre se inclino de su silla rodante y miro fijo a los ojos miel de justin-
- Snade, te dejé claro que no volvería a trabajar para la CIA después de lo que paso con Milena.-paso su mano por el cabello y rasco con nerviosismo-
- Vamos, hace más de tres años que pasó esto. – sacó una foto de una pequeña carpeta. La puso boca abajo. La curiosidad invadió a Justn.
- Esta vez tenemos a una experta masajista. ________ ________. Ha tratado con personajes importantes, incluido a Alexander Donovan.- justin abrio los ojos con impresión y su cuerpo se puso rígido-
- ¿El criminal?
- Eso creemos. Últimamente han muerto muchas chicas, y tememos que haya sido él. Además, pensamos que _______ ha tenido relaciones con Alexander. Y puede ser la próxima en morir. Tendrás que interrogarla para averiguar si sabe algo y… - la penetrante mirada de Snade se clavó en la de Justin– protegerla de cualquier peligro. Tú eres el más adecuado para ello, has sido uno de los mejores entrenados y como siempre digo... no hay otros como Bieber.
Justin negó con la cabeza. En ese momento Snade giró la foto. Justin se quedó mirando a la seductora mujer que había en ella y no pudo evitar sacar la sonrisa seductora, que producía cada vez que le parecía una chica sexy .
- Piénsatelo.
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ESPERO QUE LES GUSTE.
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